Una familia fue detenida en Luján de Cuyo por vender latas de pintura de baja calidad con la etiqueta cambiada. La familia hacía pasar los productos por pinturas de una marca de primera calidad. 

Luego de una denuncia de un comerciante ante la sospechaba que un grupo de personas vendía pinturas adulteradas, la Justicia comenzó a investigar el origen de estos baldes "truchos" estableciendo que estos eran comercializados por una pequeña empresa de Vertientes del Pedemonte, en Luján. 

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Bajo la marca "El Rey de la Pintura", esta familia elaboraba en su fábrica las pinturas. Pero, en el último tiempo habían comenzado a comprar los esmaltes a una empresa cordobesa.

Fue así y que a través de una investigación que duro poco más de dos meses, la Unidad de Delitos Económicos, llegó a esta familia.

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El modus operandi de estas personas consistía en fabricar pinturas de baja calidad, aprovechando los conocimientos que ya tenían como fabricantes de pintura bajo la marca "El Rey de la Pintura".

Una vez producida la pintura y envasada, estos le colocaban adhesivos de otras marcas, haciéndolas pasar como de una mejor calidad a la elaborada, para luego venderlas de forma directa utilizando el  de la empresa ploteado con la marca El Rey de la Pintura.

En el operativo realizado por personal policial fueron secuestrados: 650 baldes de pintura de 20 litros, un vehículo utilizado en la logística de distribución, etiquetas adhesivas de primera marca, equipos de fabricación, celulares y 950 pares de zapatillas truchas (incautadas por infracción a la Ley 22.415 del Código Aduanero) que esta familia vendía en una tienda que funcionaba en la misma propiedad.

Tanto el padre como sus dos hijos, quedaron detenidos a disposición del fiscal Hernán Ríos, que se encuentra a cargo de la Fiscalía de Instrucción N° 15 de la Unidad Fiscal de Delitos Económicos.