Indignación por burlas de los rugbiers en el juicio: "¿Dé qué se ríen hijos de puta?"

La tercera jornada de testimoniales en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa se destacó por la intensidad. Más allá de los relatos que graficaron la crueldad con la que actuaron los ocho imputados el 18 de enero de 2020, causó indignación una actitud que habrían adoptado los rugbiers acusados cuando en la sala se nombró a uno de los testigos: se miraron entre ellos y rieron.

Fue al momento de mencionar el nombre de Pablo Ventura, el primero en declarar en el día. Se trata del joven que estuvo detenido algunos días como supuesto partícipe del homicidio, pese a que esa noche se encontraba cenando junto a sus padres, a 500 kilómetros de Villa Gesell. El muchacho fue señalado por los propios rugbiers, en un presunto acuerdo para “marcarlo” cuando fueron abordados por la policía en el allanamiento, tras el cual quedaron detenidos.

Juicio por Fernando Báez Sosa: quiénes declaran en la tercera audiencia del miércoles

Periodistas y otras personas que estuvieron presentes en el Tribunal de Dolores aseguran que los acusados cruzaron palabras y se rieron al escuchar el nombre de Ventura. “Es una falta de respeto, no se sabe qué es lo que les causaba gracia”, dijo -por ejemplo- la notera de Telenueve Viviana Toledo.

Al respecto se refirió el abogado de la familia Báez, Fernando Burlando, quien no ocultó su ofuscamiento por la situación. “Estoy a muy corto tiempo de empezar a insultar a todo el mundo. Yo pregunto, ¿De qué se ríen, hijos de puta?”, vociferó.

En este sentido, remarcó que "no se pueden reír de nada", aunque se trate de una cuestión que no esté relacionada con el juicio. "Esto es un templo, es la sala de audiencias, y donde están los papás de Fernando. Si hicieron eso son unos reverendos hijos de puta, realmente", sentenció.

Ventura -por su parte- dijo no advertir movimientos llamativos por parte de los imputados. “Yo los miré dos veces, pero hasta lo que observé no levantaron la cabeza", respondió Pablo respecto a lo que pudo haber ocurrido.

José Ventura, padre de Pablo, relató a la prensa que “después de la barbaridad que hicieron (los imputados), para mí, son asesinos”. “Hicieron un acto de cobardía total: nombrar un inocente. Los diez. Y hablo de los diez, porque tanto (Alejo) Milanesi como (Juan Pedro) Guarino (sobreseidos en la causa) estaban al momento del allanamiento y ellos escucharon quién lo dijo”, planteó, en relación a la falsa acusación que pactaron los rugbiers.

Además, Ventura contó que él conocía a Marcelo Comelli, padre de Enzo Comelli: "Estaba todo bien hasta que me quiso tomar de tonto". "Cuando viajé a Villa Gesell, me dijo que ninguno de estos pibes lo había nombrado a Pablo y era imposible", contó indignado.

Máximo Thomsen, Blas Cinalli, los hermanos Luciano y Ciro Pertossi; su primo Lucas Pertossi, Enzo Comelli, Ayrton Viollaz y Matías Benicelli son los ocho rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa. La causa quedó caratulada como “homicidio doblemente agravado por alevosía y por concurso premeditado de dos personas o más”.