Tras una jornada de celebración por la entrega de premios a los campeones de las inferiores del Bajo Luján, Luján Sport Club sufrió una derrota ante Independiente Rivadavia en un partido poco brillante, correspondiente a la segunda fecha de la Liga Mendocina de Fútbol.

El encuentro estuvo marcado por polémicas decisiones arbitrales que generaron controversia en el campo de juego. El árbitro, a los pocos minutos de juego, no convalido un claro penal en favor de los del bajo y luego anuló un gol legítimo para el Granate, argumentando que el arquero de Independiente Rivadavia, Agustín Pavón, había sido golpeado por un jugador de Luján sobre la línea de gol.

A los 15 minutos del partido, el equipo dirigido por el Pollo Videla se vio en desventaja debido a un gol de Nacho Tinelli, y más tarde Joaquín Ibañez amplió la diferencia para Independiente Rivadavia.

En la segunda mitad, el veterano Mauri Chávez logró descontar para Luján Sport Club y llevar esperanza al equipo, que llegó al final con dos claras oportunidades para igualar el marcador.

Sin embargo, luego de un gran error defensivo, un contragolpe letal definido por el recién ingresado Uriel Gizzi, Independiente Rivadavia aseguró la victoria leprosa y sentenció el encuentro con un resultado final de 3 a 1 a su favor.

A pesar de la derrota, Luján Sport Club mostró garra y determinación en el terreno de juego, pero deberá ajustar algunas piezas, demostrando que está preparado para afrontar los desafíos del campeonato. Si bien el resultado no fue el esperado, el equipo del Bajo deberá seguirá trabajando arduamente para mejorar y alcanzar sus objetivos en la competencia.