Caso Alan Villouta: el empresario fue condenado a 3 años y seguirá en libertad

El Tribunal Penal Colegiado 2, conformado por los jueces Ezequiel Crivelli, Marcelo Gutiérrez del Barrio y Ariel Spektor condenaron a Cesar Alejandro Verdenelli a la pena de tres años de prisión en suspenso y a 8 años de inhabilitación para conducir cualquier tipo de vehículo. 

También deberá cumplir 3 años de reglas de conducta (presentarse periódicamente ante el Organismo Técnico Criminológico, debe abstenerse del consumo de drogas, concurrir al Tribunal cada vez que se lo cite) por el delito de homicidio culposo agravado por conducción imprudente y antirreglamentaria de un vehículo automotor. 

 Alan Villouta murió atropellado en el 2017 en Guaymallén. 
En los alegatos, el fiscal Fernando Guzzo, de Homicidios, había pedido que sea condenado a 3 años de prisión en suspenso, junto a 6 años y medio de inhabilitación para manejar.

En aquella presentación, el abogado querellante Ariel Benavidez pidió que el empresario, quien manejaba alcoholizado y se fugó de la escena tras el accidente, sea condenado a 5 años de cárcel en forma efectiva y 10 años de inhabilitación.

En tanto que la defensa, a cargo de Eduardo de Oro, fue por la absolución del imputado. Como alternativa, pidió una pena mínima, de un año, para su defendido.

Las autoridades explicaron este martes que la lectura de los fundamentos será el 21 de abril. La audiencia se desarrolló por la modalidad de videoconferencia con la participación de todas las partes, incluida la familia Villouta. 

El accidente sucedió el 26 de agosto del 2017 cuando Verdenelli conducía una camioneta Porsche por el Acceso Sur. Cuando iba hacia el norte, a la altura de La Barraca, atropelló a la víctima, quien murió en el acto.

El sospechoso escapó de la escena y se entregó dos días después. Las pruebas que recolectó el fiscal Carlos Torres, de Homicidios, indicaron que Verdenelli manejaba a alta velocidad.

Por lo tanto, ordenó su captura y lo imputó por homicidio doloso, que prevé una pena de 8 a 25 años de cárcel. Sin embargo, luego la calificación se modificó a homicidio culposo y recibió el beneficio de la prisión domiciliaria, situación que mantiene en la actualidad.

Fuente Sitio Andino